martes, 1 de noviembre de 2011

Sensibilización Medioambiental

Durante miles de años hemos ido evolucionando en armonía utilizando los recursos naturales de nuestro planeta. El medio ambiente acapara todas las facetas: económico, cultural, social, urbano y natural. 

Antes, la Tierra se regeneraba y asumía sin problemas los impactos que recibía, pero desde la revolución industrial comenzaron las dificultades para el planeta. Nuestros ecosistemas empezaron a sufrir las consecuencias y es por eso que el planeta Tierra necesita reformas urgentes. Necesitamos restablecer un modelo de vida respetuoso con el medio ambiente: es preciso cambiar los hábitos de consumo, elaborar normas que frenen el deterioro del medio ambiente, mejorar los sistemas de gestión del agua y los residuos, controlar la calidad del aire y potenciar la utilización de energías limpias.


El agua es un bien insostenible. La cantidad de agua que consumimos es cada día mayor: en la agricultura, las ciudades, etc. Los vertidos de las industrias y la utilización de pesticidas contaminan los acuíferos, arroyos, ríos y, finalmente, el mar. Ante esta situación es necesario poner en marcha sistemas que permitan ahorrar agua contando con la colaboración de toda la ciudadanía.
 
La atmosfera constituye un filtro que impide que lleguen a la superficie terrestre las radiaciones solares en toda su intensidad y es la responsable de mantener estable la temperatura del planeta. En la actualidad, la emisión de gases contaminantes (tráfico, industrias, calefacciones) está contaminando y deteriorando la capa de ozono y generando el calentamiento global del planeta. Protocolo de Kioto consiste en reducir las emisiones de seis gases responsables del calentamiento de la tierra. 

La energía es el motor del desarrollo. Cumple un papel fundamental en el crecimiento y desarrollo económico de las regiones. El consumo de energía se ha incrementado en las últimas décadas. El petróleo, recurso no renovable q se está agotando, principal fuente de energía, su utilización genera grandes problemas ambientales y sociales. Es preciso incrementar la eficacia energética y el desarrollo de energías limpias cuyo impacto ambiental es muy reducido.

Medidas en Andalucía: que la energía proceda de fuentes renovables y la reducción de los residuos que se generan, reutilización de envases y el reciclaje de los residuos.

El objetivo es avanzar hacia la sostenibilidad: significa producir sin contaminar buscando tecnologías limpias y utilizando energías renovables, conservar los ecosistemas, conseguir un bienestar duradero para todas las personas, facilitar el acceso a la educación y trabajo capacitando para la participación y colaboración en la resolución de planetas. Todos nos tenemos que unir para aspirar a una sociedad más solidaria y pacífica garantizando la supervivencia del planeta y el reparto equitativo de sus recursos. 

Es preciso que las empresas apliquen con rigor la normativa ambiental vigente y deben incorporar sistemas de gestión medioambiental y certificaciones de calidad. En el ámbito laboral es muy importante la incorporación de buenas prácticas medioambientales en la producción y los servicios. En definitiva, es esencial modificar nuestros hábitos avanzando hacia un cambio cultural que implique la solidaridad por los demás y la preocupación por el medio ambiente. Así, entre todos podremos construir un mundo más sostenible y justo, donde la sanidad, alimentación, la educación y los derechos de los habitantes del planeta estén garantizados. 

Información extraída del material didáctico del módulo de "Sensibilización ambiental" de la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico de la Junta de Andalucía.

lunes, 26 de septiembre de 2011

La Evalución


¡Haz click sobre el mapa conceptual para verlo mejor!

Conclusión: diseño de materiales didácticos

El diseño de los materiales es interesante y compleja. Hay que tener en cuenta diferentes puntos:

1.       Hacer una selección y/o creación de los materiales didácticos*

Es muy importante considerar los recursos educativos (el material) según:
-          Objetivos
-          Contenidos
-          Características de los estudiantes
-          Características del contexto
-          Estrategias didácticas

Las características específicas de cada recurso educativo han de estar en consonancia con los aspectos curriculares del contexto educativo.

*Tener en cuenta la buena utilización de los recursos didácticos para que no supongan riesgos (apoyo tecnológico, apoyo didáctico, apoyo organizativo).

2.       Seguir un protocolo sobre el diseño de los materiales

Se trata de definir criterios para orientar el diseño y la evaluación del material educativo. El material debe incluir: lectura con fundamentos sobre el tema y una guía didáctica para orientar el desarrollo de la clase.

La lectura es una investigación escrita de 500 palabras aproximadamente que aporta información, conceptos y criterios, con fuentes bibliográficas, material gráfico y mapa conceptual.

La guía didáctica incluye: un título, una presentación, el objetivo y contenido de aprendizaje, metodología, recursos y la actividad (preparación del ambiente, realización de la clase y seguimiento).

3.       Analizar los materiales

Implica hacer precisiones, observando el uso del material y comprobando que cumple con los objetivos fijados.

El material es un medio para abordar el aprendizaje, por lo tanto cualquier material puede transformarse en educativo para una situación concreta. Este material adquiere diferente forma, significado y motivo según dicha situación.

Gracias al gran desarrollo de las TIC (Tecnologías de la Información y Comunicación) se generan muchas situaciones de aprendizaje. Aún así, existen problemas para integrar este material digital y multimedia en las aulas: se necesita una reforma en la educación para poder avanzar y mejorar nuestras prácticas.

Se puede valorar el programa según las siguientes dimensiones de análisis: técnica, estética, interactiva e ideológica. Existe en el mercado unos simples y útiles test que sirven para analizar los materiales didácticos, tanto en soporte papel como digital, que tienen en cuenta estas tres dimensiones.

4.       Evaluar y adaptar los materiales para mejorarlos según el objetivo específico y general

Enseñanza y aprendizaje van cogidos de la mano: enseñamos para facilitar que el alumnado construya aprendizajes.

Los materiales deben cumplir unas funciones determinadas:
-          Innovadora y motivadora
-          Estructuradora (el material curricular es una manera de estructurar la realidad)
-          Formativa global y didáctica
-          Controladora y solicitadora (de los contenidos a trabajar)

Cuando el alumno no puede asistir a clase, se le debe proporcionar herramientas y recursos para que pueda progresar en su aprendizaje mediante actividades no presenciales.

Los materiales deben tener unas intenciones/objetivos formativos:
-          Definir unos objetivitos generales que orienten la acción formativa.
-          Formular objetivos referenciales que concreten los generales.
-          Deben de expresar las capacidades que el alumno debe desarrollar.

Los contenidos son los saberes culturales a través de los cuales se consolidan las capacidades definidas en los objetivos. Estos contenidos se clasifican en: conceptuales (saber saber), procedimentales (saber hacer) y latitudinales (saber ser). 

viernes, 9 de septiembre de 2011

La motivación: los factores higiénicos y motivacionales

En psicología y filosofía, motivación son los estímulos que mueven a la persona a realizar determinadas acciones y persistir en ellas para su culminación. Este término está relacionado con voluntad e interés.
Frederick Herzberg propone una teoría de la motivación en el trabajo, enfatizando que el homo faber se caracteriza por dos tipos de necesidades que afectan de manera diversa el comportamiento humano: el factor higiénico y el factor motivacional.

Los factores higiénicos o factores extrínsecos, están relacionados con la insatisfacción, pues se localizan en el ambiente que rodean a las personas y abarcan las condiciones en que desempeñan su trabajo. Como esas condiciones son administradas y decididas por la empresa, los factores higiénicos están fuera del control de las personas. Los principales factores higiénicos son: el salario, los beneficios sociales, el tipo de dirección o supervisión que las personas reciben de sus superiores, las condiciones físicas y ambientales de trabajo, las políticas y directrices de la empresa, el clima de relaciones entre la empresa y las personas que en ella trabajan, los reglamentos internos, el estatus y el prestigio, y la seguridad personal, etc. Es decir, son factores de contexto y se sitúan en el ambiente externo que circunda al individuo.
 
En cambio, los factores motivacionales o factores intrínsecos, están relacionados con la satisfacción en el cargo y con la naturaleza de las tareas que el individuo ejecuta. Por esta razón, los factores motivacionales están bajo el control del individuo, pues se relacionan con aquello que él hace y desempeña. Los factores motivacionales involucran los sentimientos relacionados con el crecimiento y desarrollo personal, el reconocimiento profesional, las necesidades de autorrealización, la mayor responsabilidad y dependen de las tareas que el individuo realiza en su trabajo. Tradicionalmente, las tareas y los cargos han sido diseñados y definidos con la única preocupación de atender a los principios de eficiencia y de economía, suprimiendo los aspectos de reto y oportunidad para la creatividad individual. Con esto, pierden el significado psicológico para el individuo que los ejecuta y tienen un efecto de "desmotivación" que provoca apatía, desinterés y falta de sentido psicológico, ya que la empresa sólo ofrece un lugar decente para trabajar.

En clase, hemos trabajado la motivación a través de una actividad que consistía en determinar si una acción impactaba en un factor higiénico o en un factor motivacional.  La actividad se ha realizado de manera individual: cada uno ha contestado según su propio criterio. Después, en petit-comité (grupos de tres) hemos debatido cada acción hasta lograr que nos pusiéramos de acuerdo a la hora de seleccionar el tipo de motivación. Al finalizar, los pequeños grupos hemos expuesto nuestras opiniones al respecto y se ha creado un gran debate grupal, pues algunos lo tenían claro y otros estaban confundidos.

La motivación escolar constituye uno de los factores psico-educativos que más influyen en el aprendizaje. Esta no se restringe a la aplicación de una técnica o método de enseñanza en particular, por el contrario, la motivación escolar conlleva una compleja interrelación de diversos componentes cognitivos, afectivos, sociales y de carácter académico que se encuentran involucrados y que de una u otra forma tienen que ver con las actuaciones de los alumnos como la de sus profesores. De igual forma es un hecho que la motivación estará presente en todo acto de aprendizaje y en todo procedimiento pedagógico, ya sea de manera explícita o implícita y sólo podrá interpretarse analizando las incidencias y características propias de los actores y comunidad educativa implicada ( Díaz y Hernández 2002 p. 64 ).

He encontrado cierta información bastante interesante sobre las creencias y/o mitos de la motivación escolar que deben ser definitivamente erradicados. Estos son:
- La motivación escolar es un proceso exclusivamente endógeno, interpersonal, donde intervienen poco los factores interpersonales o sociales.
- La disposición favorable para el aprendizaje es inerte a la personalidad del alumno y está determinado por su ambiente familiar o contexto socioeconómico.
- La motivación es un proceso afectivo, me gusta o no me gusta.
- La motivación es un proceso que se origina al inicio de una actividad o tarea del aprendizaje.
- Para motivar a los alumnos lo más importante es disponer de un buen sistema de recompensa o premio de sus logros.
- Los buenos alumnos están motivados por el aprendizaje en sí mismos, los malos estudiantes, por las recompensas externas que pueden obtener.
- Los profesores no son responsables de la motivación de sus alumnos.
- Es poco probable que se llegue a mejorar la motivación por aprender en alumnos con historia de fracaso escolar, con algún tipo de discapacidad, apáticos o ansiosos. ( Díaz y Hernández 2002).

jueves, 8 de septiembre de 2011

¿Mi mochila, tu mochila o nuestra mochila?

Albert Gespí y Federico Malpica tratan el tema de la calidad educativa en el artículo“¿La calidad educativa depende de nuestra mochila como docentes?”. 

Hablamos de calidad educativa cuando un centro cumple con sus finalidades educativas. Éstas, a su vez, deben de tener coherencia con lo que está pasando en el aula para garantizar la calidad. Se han creado referentes que orientan a la hora de alcanzar dicha calidad:


-       -   La Norma ISO 9001, Organización Internacional para la Estandarización, en inglés International Standarization Organization, especifica los requisitos para un buen sistema de gestión de la calidad que pueden utilizarse para su aplicación interna por las organizaciones, para certificación o con fines contractuales.

-        -  La Fundación Europea para la Gestión de la Calidad, en inglés European Foundation for Quality Management EFQM, asume su papel como clave en el incremento de la eficacia y la eficiencia de las organizaciones europeas, reforzando la Calidad en todos los aspectos de sus actividades, así como estimulando y asistiendo el desarrollo de la mejora de la Calidad.

La mochila de cada docente es única y se adapta a las necesidades del alumnado, por lo que cualquier otro docente no la puede aplicar a su trabajo, aun impartiendo este último la misma materia, porque en ella guardamos nuestra propia ideología y estilo de metodología.

Ahora bien, como dicen Gespí y Malpica, es aconsejable revisar y remover nuestras mochilas para conseguir una calidad educativa-pedagógica, especialmente cuando hay un cambio de finalidad en el aprendizaje. En este caso, hay que tener en cuenta que todo el equipo docente debería de trabajar de manera coordina. Finalmente, la nueva mochila aportará seguridad en el aula a cada uno de los docentes y, en general, al equipo docente.

viernes, 2 de septiembre de 2011

La enseñanza de las competencias


Según Antoni Zabala y Laia Arnau en el artículo sobre “La enseña de las competencias”, la enseñanza de estas provocará cambios importantes en la práctica educativa. 

La competencia se define como:

-          El conjunto de acciones eficaces utilizando recursos propios = DISPOSICIÓN
-          Con una intención definida y actitudes determinadas = dotar de SENTIDO
-          Los procedimientos, habilidades y destrezas que implica la acción = DOMINIO
-          El dominio sobre: hechos, conceptos y sistemas conceptuales = OBJETOS DE CONOCIMIENTO
-          Una acción que implica la INTEGRACIÓN de actitudes, procedimientos y conocimientos (conceptos) y su INTERRELACIÓN entre sí. 

El fin de una acción competente es la resolución de problemas planteados en una situación de realidad determinada. Para abordarlo hay que seguir un proceso delicado y determinado. El proceso de una acción competente implica: 


  1. Necesidad de intervenir en una SITUACIÓN ÚNICA Y COMPLEJA (contexto determinado)
  2. Pasos para intervenir de forma eficaz en una determinada situación:
    1. Analizar: obtener información e identificar problemas y cuestiones a resolver. Valorar y seleccionar el esquema de actuación más adecuado.
    2. Aplicar el esquema de actuación de forma flexible y estratégica en un determinado contexto.
    3. Movilizar los componentes de la competencia: actitudes (saber ser), procedimientos (saber hacer), hechos y conceptos (saber).
Las competencias pueden ser desarrolladas pero no enseñadas, ya que se llevan a cabo en situaciones concretas, reales y únicas con una complejidad de variables indeterminada. Por lo tanto, la situación futura resulta totalmente impredecible. 

Aunque las aplicaciones concretas de las competencias no pueden enseñarse, los esquemas de actuación y de las competencias, su selección y práctica en distintos contextos generalizables sí se pueden. Los criterios para la enseñanza de competencias son:


- Su significatividad. Condiciones: conocimientos previos del alumnado, presentando los contenidos de forma significativa y funcional, provocando un conflicto cognitivo, estimulando su autoestima, mejorando su autoconcepto y ayudándolos a aprender a aprender de forma autónoma.

- La complejidad de la situación en la que estas deben utilizarse.  Abordaje de la realidad en toda su complejidad. El conocimiento disciplinar es imprescindible para la comprensión de la realidad. Pensamiento se presenta complejo.

- Su carácter procedimental. Interpretación/comprensión, identificación de los problemas, identificación de la información relevante, revisión de los distintos esquemas de actuación, análisis de la información, valoración de las variables reales y aplicación del sistema de actuación.

La secuencia de enseñanza-aprendizaje debería cumplir con:

  1. Las actividades deben de partir de situaciones significativas y funcionales. Se requieren ayudas de diferente grado y actividad guiada. Actividades de trabajo independiente.
  2. Secuencia = modelos de desarrollo del contenido del aprendizaje.
  3. Secuencia clara con un orden de actividades que siga un proceso gradual.

Por lo tanto, hemos visto que el proceso de una acción competente implica el dominio de unas habilidades previas antes de la aplicación estratégica del esquema de actuación seleccionado. Por ejemplo, para trabajar los contenidos factuales se recomienda utilizar ejercicios de repetición, organizaciones significativas y asociaciones. En cuanto a las actitudes, el profesorado es un modelo a seguir para el alumnado, por lo tanto debe ser coherente con su manera de ser y hacer.

“Enseñar competencias implica saber intervenir en situaciones reales, que por ser reales siempre son complejas”,  Antoni Zabala y Laia Arnau

“Se aprende haciendo, lo que comporta una organización del aula compleja, con una gran participación del alumnado y en la que los distintos ritmos de aprendizaje se hagan extraordinariamente visibles”, Antoni Zabala y Laia Arnau

jueves, 1 de septiembre de 2011

No basta con delegar, sino con saber hacerlo


Tratando el tema del liderazgo, se nos presentó un ejercicio tipo cuestionario. Este nos permitió realizar un autodiagnóstico sobre nuestra actitud a la hora de delegar.

Rellenamos el cuestionario, el cual constaba de treinta afirmaciones y cinco respuestas válidas para cada afirmación, de manera individual. Después, puntuamos las respuestas que estaban divididas en dos tablas: la A donde las ideas eran favorables a la delegación y la B donde eran contrarias. Finalmente, obtuvimos la puntuación global sumando los totales de cada tabla.

Mi puntuación global fue quince. Esto significa que, al situarme entre cero y treinta, “manifiesto cierta disposición para el ejercicio de la delegación. No obstante, todavía tengo un amplio margen para potenciarla”. 

Es obvio que la buena delegación produce resultados óptimos. En el ámbito profesional que me pertoca, la enseñanza, también se aplica esta teoría. Soy consciente de que me encuentro en un punto intermedio y estoy dispuesta a aprender las reglas del juego e intentar aplicarlas, que al fin y al cabo es la parte más difícil y lo que realmente importa. Por otro lado, no es tan sencillo como parece. Me surgen dudas y me autocuestiono  que, al no poder delegarlo todo, ¿qué se debería delegar y que no? 

Pues bien, navegando sin barco pero con rumbo en Internet, encontré un interesante artículo que habla sobre las cinco tareas que un jefe no debería delegar, estas son las siguientes: 


1. Definir y potenciar una cultura corporativa.
2. Dedicar tiempo a evaluar, reclutar y desarrollar a los colaboradores.
3. Cultivar la confianza y los canales de comunicación.
4. Hacer trabajar al equipo sincronizadamente.
5. Inmiscuirse cuando se presente conflictos.

Estoy totalmente de acuerdo en que si un buen directivo se involucrara en este tipo de funciones en lugar de derivarlas a otros, se lograría una mayor productividad empresarial. Y lo mismo ocurriría si interpretáramos esta información en el campo de la docencia: el profesor que aplicase estas tareas lograría una mayor productividad escolar.

Si queréis leer más sobre el artículo del que os he hablado clicad en el link.

¿Nueve delfines o una pareja?




Las ilusiones ópticas resultan muy interesantes. Hay una especialmente curiosa y la he adjuntado aquí para que la podáis ver. Esta imagen se llama “Mensaje de amor de los delfines” de Sandro Del-Prete. La botella contiene un erótico mensaje compuesto por las figuras de nueve delfines.

¿Cuántos años tienes? Si eres joven e inocente, probablemente podrás ver el grupo de delfines jugando. Pero si eres más mayor, seguramente verás una pareja desnuda. Se dice que los niños no tienen el contexto para ver otra que no sea los delfines. Mientras que en los adultos ocurre exactamente lo contrario.

Nuestro bagaje y experiencia en la vida marcan quiénes somos hoy: cómo pensamos, cómo sentimos, como nos relacionamos entre nosotros y hasta cómo observamos la realidad. Este conjunto de conocimientos es único y especial. Es decir, la realidad es una, pero es sutilmente subjetiva bajo los ojos que la ven.

Y tú, ¿puedes encontrar los nueve delfines? Cuesta un poco al principio pero una vez encuentras uno, el resto se ve con facilidad.

¡Atención!

El otro día Albert pasó un vídeo y nos pidió que siguiéramos las siguientes indicaciones: observar el vídeo y contar el número de veces que el equipo blanco se pasa la pelota.

Después de ver el video, se lanza la pregunta: “¿cuántas veces se ha pasado la pelota el equipo blanco?”. No obstante, esta pregunta no es la interesante, ya que se trata de una “pregunta trampa” que se utiliza para desorientar la atención.

La gran pregunta es: “¿has visto el mono?”. “¿El mono?” se pregunta uno así mismo con cara de confusión que, poc a poc, como las gallinas, se va transformando en signo de interrogación. Obviamente, si no has sido capaz de detectar el mono, no entiendes nada de nada hasta que no vuelves a ver el vídeo otra vez. Esto es lo que nos pasó a la gran mayoría de la clase.

A la capacidad que explica este hecho se le llama atención. Los objetos se perciben a través de los sentidos y se procesa la información recibida para darle un significado. A este proceso mental se le llama percepción y no es más que un proceso de selección. A ésta selección de estímulos se le llama atención. La atención es una especie de filtro de la información y un mecanismo de alerta ante los datos importantes.




Los factores de la atención se dividen en: externos (intensidad, tamaño, color, …) e internos (necesidad biológica y los intereses sociales). Otros fenómenos que influyen en la atención son: la atención aumenta ante estímulos agradables, la atención disminuye ante estímulos desagradables, dejamos de prestar atención a experiencias familiares o repetitivas, esto se le llama habituación.

La atención puede ser de dos tipos: sostenida/global o selectiva. Así pues, la atención selectiva es la habilidad de una persona para   responder a los aspectos esenciales de una tarea  o situación y pasar por alto o abstenerse de hacer caso a aquellas que son irrelevantes (Kirby y Grimley, 1992).

Los profesionales del campo de la enseñanza debemos de ser conscientes de este hecho tan importante. En un momento dado, los alumnos pueden pasar por alto una serie de acontecimientos relevantes que suceden dentro del aula. Por una parte, es lógico y hasta común que esto suceda, puesto que así trabaja nuestra percepción. No obstante, todo llevado al extremo es contraproducente, así que no está de más prestar especial atención, valga la redundancia, para poder detectar necesidades que nuestro alumnado pueda tener respecto al tema.


miércoles, 24 de agosto de 2011

Aprender divirtiéndonos


En el programa “El sistema educativo es anacrónico”, Punset realiza una entrevista a Ken Robinson, educador, escritor y conferenciante británico, experto en asuntos relacionados con la creatividad, la calidad de la enseñanza, la innovación y los recursos humanos.

Robinson os explica que hay tres esferas que han dado un giro de 360º: la económica, la cultural y la personal, mientras que la educacional está estancada en cuanto a programas y objetivos. Es decir, los sistemas educativos están desfasados, limitados y caducados, puesto que se crearon para cubrir unas necesidades que la Revolución Industrial requería en su momento: unas materias útiles que continúan implantándose a día de hoy, sin embargo, ya no nos sirven. Se centraban y nos centramos en lo académico por la presión industrial: la lectura, las matemáticas y las ciencias. En cambio, algunas disciplinas como las artísticas y humanidades han sido las más olvidadas. 

 “La educación está reprimiendo los talentos y habilidades de muchos estudiantes; y está matando su motivación para aprender”, afirma Ken Robinson. Los niños llegan al mundo adulto sin tener ni idea de sus talentos y capacidades y la sociedad actual necesita jóvenes creativos y motivados. Y voilà! Problema en bandeja. ¿Qué es lo que de verdad gusta y motiva a nuestros jóvenes? Aprender jugando con sus amigos, descubrir cosas nuevas navegando en la web, etc. Consiguen aprender descubriendo lo que realmente nos motiva y les hace sentir bien. 

Ha habido muchos avances en ciencia y tecnología que han hecho que hayamos pasado de una sociedad industrial basada en la producción masiva de objetos a una sociedad de servicios e información en la que el motor son las ideas y la creatividad. Por lo tanto, hay que retomar la creatividad tanto artística como científica. Nuestro deber es el de transformar la escuela a través de un aprendizaje más social y emocional, fomentando la educación personalizada, potenciando el desarrollo de cada individuo y estimulando la creatividad, la pasión, la energía y el talento.

 Los retos educativos tienen ahora tres objetivos: económico, cultural y personal (convertirnos en la mejor versión de nosotros mismos). El futuro está lleno de nuevos desafíos que requerirán nuevas soluciones, ya que nos enfrentamos a retos que carecen de precedentes en toda la Historia de la Humanidad. Esto es, necesitamos una educación basada en la creatividad para estar a la altura de los desafíos del ahora. 


No podría estar más de acuerdo con el señor Ken Robinson: el clic de la cuestión de la educación está en la experiencia, en el momento, en la alegría de descubrir algo y no en la propia respuesta. Por lo tanto, cuanto más motivador y creativo sea el momento del aprendizaje, más diversión obtendrá el niño, enriqueciéndose así de todo lo que conlleva el proceso enseñanza-aprendizaje.  





“No aprendemos repitiendo, de memoria, sino haciendo, cuando nos emocionamos”, Ken Robinson.

“Si no estás dispuesto a equivocarte, nunca llegarás a nada original”, Ken Robinson.

“Nunca andes por el camino trazado… pues él te conduce únicamente hacia donde los otros fueron”, Graham Bell

lunes, 22 de agosto de 2011

Somos nuestros genes, nuestro entorno y nuestra experiencia vital.


El prestigioso neurofisiólogo Carlos Belmonte es experto en los mecanismos del dolor y el funcionamiento del cerebro. En el programa Redes es entrevistado por Punset en el vídeo “Antes y después de conocer el cerebro”. En él, nos explica que el cerebro “es uno de los órganos más sofisticados del planeta, pero el cerebro humano, como cualquier otro producto de la evolución, tiene sus limitaciones.” Conocer estas limitaciones “es el gran reto de la neurociencia de hoy, y es lo que va a permitir, paradójicamente, una drástica revolución de nuestra sociedad.”
 
Cuando una víctima da detalles de una situación vivida con un alto nivel de estrés, por ejemplo un ataque, su cerebro presenta problemas a la hora de recordarla y tiende a rellenar huecos, debido al estrés del ataque. Además, en los interrogatorios, la memoria se ve influenciada por las sugerencias y las preguntas guiadas, ya que, en muchos casos, se asumen hechos no ocurridos como ciertos llegando a manipular al interrogado. El mundo necesita testimonios veraces y gracias a la aplicación de estos descubrimientos en el campo judicial, éste cambiará a mejor.

Dentro de la educación, la neurociencia también se hace un hueco. Los períodos infantiles son críticos para el desarrollo y Belmonte nos dice que se aprende con la edad a ser empático, pero que también hay que educar para serlo. Como futura maestra, estoy totalmente de acuerdo en educar y potenciar el dominio personal y la empatía (cuarta habilidad práctica de la Inteligencia Emocional), que son tan necesarios para conseguir una vida individual y social plena.

Personalmente, el mundo de la neurología me resulta increíblemente apasionante por todas las aportaciones y aplicaciones que tiene. Sin duda alguna, su desarrollo presenta un gran desafío y avance para la humanidad y un gran cambio de la sociedad del s. XXI.

“Lo más sencillo es empeorar el cerebro y muy difícil mejorarlo”. Carlos Belmonte